"Nada es veneno y todo es veneno, la diferencia está en la dosis" --Paracelso--

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Clorpromazina

 


Clorpromazina.

Como antipsicótico actúa bloqueando los receptores postsinápticos dopaminérgicos mesolímbicos en el cerebro. También producen un bloqueo alfaadrenérgico y deprimen la liberación de hormonas hipotalámicas e hipofisarias. El bloqueo de los receptores dopaminérgicos aumenta la liberación de prolactina en la hipófisis. Como antiemético inhibe la zona disparadora quimiorreceptora medular y su acción ansiolítica se piensa que se produce por reducción indirecta de los estímulos sobre el sistema reticular del tallo encefálico.

Nombre comercial más común: Largactil, Torazina, Thorazine, Ampliactil. entre otros.

Indicaciones terapéuticas:
  • Tratamiento de los trastornos psicóticos
  • Esquizofrenia
  • Fase maníaca de la enfermedad maniacodepresiva. 
  • Terapéutica alternativa a los fármacos de primera línea en el tratamiento en el corto plazo de la ansiedad no psicótica. 
  • Tratamiento de problemas severos de comportamiento en niños.
  •  Tratamiento coadyuvante del tétanos y en la porfiria aguda intermitente.

Presentación: 

  • Comprimidos de 25 o 100 mg en caja con 20 o 50 comprimidos
Dosis:
  • Se recomienda una dosis individualizada y que fluctue entre 25 y 500 mg cada 24 horas.
  • Generalmente se recomienda una de entre 75 - 150 mg cada 24 hrs.

Efectos adversos: 
  • Hipotensión arterial
  • Depresión miocárdica
  • Síncope
  • Discinesia
  • Eritema
  • Urticaria
  • Fotosensibilidad
  • Discrasias sanguíneas
  • Convulsiones
  • Tortícolis
  • Síndrome extrapiramidal
  • Acatisia
  • Rigidez
  • Sialorrea
  • Hipotensión ortostática
  • Sedación y/o somnolencia
  • Sequedad de boca
  • Retención urinaria
  • Constipación
  • Íleo paralítico
Contraindicaciones:
  • Hipersensibilidad al fármaco
  • Depresión severa del sistema nervioso central
  • Estados comatosos
  • Enfermedad cardiovascular severa
  • Precaución al administrar en pacientes con alcoholismo, angor pectoris, discrasias sanguíneas, glaucoma, disfunción hepática, enfermedad de Parkinson, úlcera péptica, retención urinaria, síndrome de Reye, trastornos convulsivos, vómitos.

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